Alias Residente: un sex symbol y un rapero que usa la música como denuncia.
Se hizo conocido como Residente, pero su verdadero nombre es René Pérez. Este artista se animó a entrar en las casas de todas las muchachitas para hacer estallar los estereotipos de galán y para que muevan las caderas sin parar, mientras escuchan sus pegadizas letras.Así, lejos de la imagen de bombón inofensivo, este boricua te calienta las hormonas no sólo con sus canciones dignas de fiesta cachengue (Atrévete-te-te es un claro ejemplo), sino también con rimas que denuncian a las empresas multinacionales y algunos organismos degobierno.
El mes pasado disfrutaste de esta actitud de desparpajo en vivo y en directo, en los recitales que Calle 13 dio en el Luna Park y que se convirtieron en una fiesta bien latina. Con temas como Baile de los pobres, Nadie como tú (canción en la que contó con Andrés Calamaro como invitado), La Perla, Latinoamérica, Tango del pecado,Hormiga brava, Un beso de desayuno y Calma pueblo; este rapero puso a saltaral más aburrido de los espectadores y a delirar a cada uno de sus fanáticos (y fanáticas, claro).
Pero toda esta historia comenzó en Trujillo Alto, un pueblo del área metropolitana al sur de San Juan de Puerto Rico, donde vivían René y su medio hermano Eduardo José CabraMartínez, hoy Visitante. Allí, el rap del under puertorriqueño captó a René, quepronto se hizo conocido como El Déspota.La cultura popular lo alucinó, entonces fue por más: luego que conseguir un bachillerato en artes y una maestría en cine, estudió Diseño de sonido en el Savannah College of Art and Design y, después de pasar una temporada en Barcelona tomando clases de cine aescondidas, regresó a su país natal.
Me infiltro en el sistema y lo exploto desde adentro”, avisó Residente. Y en eso está su banda. A fines de 2005, lograron lanzar el primer disco llamado Calle 13; en 2007 presentaron su segundo álbum titulado Residente/Visitante; al año siguiente editaron Los de atrás vienen conmigo. Y si el éxito comercial iba en aumento, su postura de denuncia encontró el clímax en su último trabajo, Entren los que quieran.
El tiene una biblioteca de frases sexy, de rimas frescas. El sale a escena con pantalones y sin remera, como si fuese a participar de una pelea. El ataca, manifiesta y critica con sus letras, pero también enamora y roba suspiros cuando se pone en clave romántica. Su vocabulario atrevido, lejos de ofender, produce cosquilleos. Porque, sabés bien, René, que no hay nadie como tú, mi amor.
Se hizo conocido como Residente, pero su verdadero nombre es René Pérez. Este artista se animó a entrar en las casas de todas las muchachitas para hacer estallar los estereotipos de galán y para que muevan las caderas sin parar, mientras escuchan sus pegadizas letras.Así, lejos de la imagen de bombón inofensivo, este boricua te calienta las hormonas no sólo con sus canciones dignas de fiesta cachengue (Atrévete-te-te es un claro ejemplo), sino también con rimas que denuncian a las empresas multinacionales y algunos organismos degobierno.
El mes pasado disfrutaste de esta actitud de desparpajo en vivo y en directo, en los recitales que Calle 13 dio en el Luna Park y que se convirtieron en una fiesta bien latina. Con temas como Baile de los pobres, Nadie como tú (canción en la que contó con Andrés Calamaro como invitado), La Perla, Latinoamérica, Tango del pecado,Hormiga brava, Un beso de desayuno y Calma pueblo; este rapero puso a saltaral más aburrido de los espectadores y a delirar a cada uno de sus fanáticos (y fanáticas, claro).
Pero toda esta historia comenzó en Trujillo Alto, un pueblo del área metropolitana al sur de San Juan de Puerto Rico, donde vivían René y su medio hermano Eduardo José CabraMartínez, hoy Visitante. Allí, el rap del under puertorriqueño captó a René, quepronto se hizo conocido como El Déspota.La cultura popular lo alucinó, entonces fue por más: luego que conseguir un bachillerato en artes y una maestría en cine, estudió Diseño de sonido en el Savannah College of Art and Design y, después de pasar una temporada en Barcelona tomando clases de cine aescondidas, regresó a su país natal.
Me infiltro en el sistema y lo exploto desde adentro”, avisó Residente. Y en eso está su banda. A fines de 2005, lograron lanzar el primer disco llamado Calle 13; en 2007 presentaron su segundo álbum titulado Residente/Visitante; al año siguiente editaron Los de atrás vienen conmigo. Y si el éxito comercial iba en aumento, su postura de denuncia encontró el clímax en su último trabajo, Entren los que quieran.
El tiene una biblioteca de frases sexy, de rimas frescas. El sale a escena con pantalones y sin remera, como si fuese a participar de una pelea. El ataca, manifiesta y critica con sus letras, pero también enamora y roba suspiros cuando se pone en clave romántica. Su vocabulario atrevido, lejos de ofender, produce cosquilleos. Porque, sabés bien, René, que no hay nadie como tú, mi amor.
Residente René Pérez calle
