El galán brasilero Reynaldo Gianecchini, protagonista de exitosas telenovelas como “El color del pecado”, “Belíssima” y “Siete pecados”, debió ser hospitalizado de urgencia y permanecer en terapia intensiva…
El actor brasilero Reynaldo Gianecchini, protagonista de telenovelas como Siete Pecados, Lazos de familia y El color del pecado, debió ser hospitalizado días pasados en forma urgente en la Clínica San Vicente, de la ciudad de Río de Janeiro, luego de sufrir una reacción alérgica a un antibiótico que contenía penicilina. En declaraciones a la prensa de su país, Reynaldo aseguró: “Hace unas semanas tuve una intoxicación alimentaria por comer camarones. Después tuve una fuerte infección en la garganta, que me causó fiebre muy alta… A pesar de eso, seguí haciendo las funciones de la obra de teatro ‘Doce deleite’ y como la infección no se iba, tomé un medicamento de esos que toma todo el mundo, a base de penicilina…”.Pero lamentablemente el sex symbol desconocía que era alérgico a esa sustancia, la cual le provocó una terrible reacción que lo llevó a permanecer en terapia intensiva. “Detesto los hospitales pero tuve que ir… Los médicos me dijeron que tenía una reacción brutal y me dieron un tratamiento a base de cortisona…”, indicó.“Nunca había tenido un problema con este medicamento, lo tomaba como cualquier persona desde que era chico pero esas cosas se van acumulando en el cuerpo hasta que un día puede reaccionar… Eso fue lo que me sucedió a mí… Fue fuerte, estaba todo colorado, mi cuerpo se llenó de ampollas y tenía picazón…”, sostuvo Gianecchini, quien ya se encuentra fuera de peligro.
El camarón“Todo empezó con una intoxicación que tuve por culpa de unos camarones que comí, y después me agarró una infección fuerte en la garganta, que me dio una fiebre altísima”, comienza a contar Reynaldo, ya fuera de la clínica Sao Vicente, de Río de Janeiro, en la que estuvo internado durante cuatro largos días. “Aún así, continué con la obra –estaba haciendo “Doce Deleite”, en el Teatro Dos Cuatro-. Es que los actores somos así, tenemos ese amor por el teatro y no queremos faltar, pero todo ese esfuerzo me dejó aún más débil y me engripé, con esas gripes terribles que tardan en irse”, sigue contando el actor antes de llegar a la peor parte. “Aún así seguí con el espectáculo. No me gusta tomar remedios, pero me llenaba de aspirinas e iba al teatro. El escenario es una locura, da una energía extra. A veces yo aún dudaba si iba a terminar o no la función, pero lo lograba. Como la infección y la gripe no pasaban, resolví tomar un remedio más fuerte, por cuenta propia. Escogí un antibiótico común, de esos que todo el mundo toma, a base de penicilina”. De allí en más, el terror.“Finalmente, el domingo 20 de julio yo ya estaba sintiéndome muy mal. Detesto el hospital, pero tuve que ir. Allá, los médicos dijeron que tuve una reacción alérgica brutal, y no salí más. Quedé todo el tiempo a base de cortisona”. Esa maldita penicilinaSí, claro, a esta altura todos nos estamos preguntando si Reynaldo no sabía que era alérgico a la penicilina. Y aquí está la respuesta: “¡Es que hasta ese momento, no lo era! Nunca había tenido problema con ese medicamento, lo tomo normalmente, como cualquier persona, desde niño. Pero esas cosas van acumulándose en el cuerpo. Un día, el organismo puede reaccionar y fue lo que pasó conmigo. Fue fuerte, quedé todo rojo, lleno de ampollas y con una picazón generalizada”. La crisis fue grave, y Reynaldo lo admite. “Sí, fue grave, bastante grave; pero no tuve miedo de morir. En realidad no tuve miedo porque no soy de pensar en esas cosas y soy muy optimista. Sí, fue grave, no voy a desestimar el asunto, pero tampoco para exagerar porque se ha dicho que tuve un choque anafiláctico y no fue así” , agrega el brasileño refiriéndose a las versiones de la prensa local que hablaban de ese choque que, en medicina, es la reacción grave y a veces mortal del sistema inmunitario a un antígeno al que una persona ha estado expuesta antes y que puede incluir picazón de la piel, edema, colapso de los vasos sanguíneos, desmayo, dificultad para respirar y muerte. “Quedé en terapia intensiva porque necesitaban monitorear el corazón, sólo por eso”, aclara el actor, quien por varios días tuvo aún la piel enrojecida y con picazón. "No volví a la obra apenas salí de la clínica porque la pieza es desgastante, por eso tuve que esperar una semana más, hasta el jueves 31 de julio. Es que nos cambiamos varias veces, cantamos, bailamos... El médico consideró mejor que me cuidara porque podía haber una recaída, pero ahora que regresé estoy pleno nuevamente. Nada como tener salud”, concluye Reynaldo, dejando a todas sus fans latinoamericanas tranquilas ya que hay galán para rato. Aunque, a no ser que Telefe –o los demás canales de la Argentina- sigan comprando sus viejas telenovelas (aquí ya se lo vio, en diferentes canales, en “Terra Esperanza”, “El Color del pecado” y “Lazos de familia”) el hombre ha decidido guardarse por un tiempo en lo que a las tiras respecta. Es más, acaba de rechazar un papel en la nueva novela "Negocio de China". “Sería un placer trabajar allí, pero yo no quiero volver ahora. En febrero terminé de grabar ‘Siete pecados’, estaba en el aire también a la tarde, en la repetición de 'El color del pecado' (no sólo en la Argentina suceden estas cosas....), así que resolví que debo descansar de la tira y el público de mí. Voy a invertir en el teatro ya que vamos de gira con la obra, y en el cine. Hice dos películas en el medio de la tevé y el teatro, y se estrenan en 2009, así que más no puedo pedir”, agrega Reynaldo, quien por lo visto, recuperó la salud, el dinero no le falta y amor.... Bueno, ese sí que es un tema que nos interesa sobremanera.La suerte de la feaComo ya es sabido, el hombre nacido un 12 de noviembre de 1972 rompió con quien fue su mujer sin papeles durante ocho años, la periodista Marília Gabriela, quien lo dobla en edad y que, además, es la madre de su mejor amigo. Luego de tanto tiempo, la relación se terminó y se separaron en 2006. ¡Y fue ella quien lo abandonó y lo dejó con el corazón hecho pedazos! Al poco tiempo, el galán fue consolado por una cantante mulata: Petra, la hija de Gilberto Gil, quien, en este caso, lo duplica en kilos. El dice que son sólo amigos, y creámosle o pongámonos a rezar la plegaria de San Soldán, esa que dice: "¡No puede haber tanta maldad, mi amor”. Porque, no es por discriminar, en absoluto, pero una cuidándose de comer un miserable bocadito Cabsha y nuestro “Reynal” que se va con esa chica rechoncha por los cuatro costados... Creámos que sólo son amigos, así conservamos la esperanza de saberlo solito y a la espera de su Julieta. Mientras tanto, sigamos estirando el brazo para ver si Dios se pone a escribir novelas y nos manda un tachero como él. Porque, la verdad, con un hombre así, no hay santa que aguante ni pecadora que se resista. Y mucho menos, damas comprometidas que soporten la tentación de pecar. Si hasta las “Mujeres de nadie”, que son de Adrián Suar, deben ser de Gianecchini cuando el reloj da las tres... M.T.Fotos: Brainpix y Cedoc
