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domingo, 31 de agosto de 2008

Cumple un año más William Levy






El actor William Levy cumplió este viernes 28 años de edad, y lo festejó dando entrevistas a los medios y grabando en la telenovela "Cuidado con el ángel", que protagoniza con Maite Perroni.

Con el clásico pastel, Levy celebró un año más, en su ascendente carrera artística.

"Estamos hablando y llega en un momento el pastel y la gente, me sorprendí, pero qué lindo de verdad. Estoy aquí trabajando nada más y creo que estar saludable y trabajando en pleno cumpleaños es lo mejor que puede tener, aunque esté lejos de mi familia (viven en Miami), pero bueno eso es parte de la vida", expresó el actor.

Su mejor regalo es su hijo: "Me mandaron una foto de él diciéndome que me extrañaba, un papel así, una hoja en blanco decía te extraño y él así en la foto y pues ya la vi, yo creo que fue el mejor regalo que tuve hoy".



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A AXL ROSE 'LE PONE' KELLY OSBOURNE






Parece que el romanticismo no va con el cantante Axl Rose, que prefiere las cosas claras. Tal vez por eso, en una reciente fiesta en Hollywood, se dedicó a perseguir a Kelly Osbourne diciéndole que quería acostarse con ella. La hija del líder de Black Sabbath no sucumbió a los encantos del otrora líder de Guns n' Roses. (Fotos: EL MUNDO | REUTERS)


sábado, 30 de agosto de 2008

El heróico rescate de Brad Pitt


El actor evitó que un joven fan, que quería pedirle un autógrafo, se ahogue en un lago en Venecia.
La estadía de Brad Pitt en Venecia durante la 65 edición de su clásico festival de cine sin duda no pasará inadvertida.

Y no sólo por el premio que ha recibido por la interpretación de Jesse James en la película de su asesinato ni tampoco por la expectación de los reporteros de crónica rosa, que le persiguen para que hable de sus mellizos, sino también porque le ha salvado la vida a uno de sus propios fans.

Según informan varios periódicos internacionales en su edición de hoy, el hecho ocurrió el jueves, mientras varios admiradores del actor de 44 años le rodeaban para conseguir un autógrafo suyo al borde de un canal.

Uno de ellos, emocionado por la cercanía con su ídolo, realizó un movimiento brusco y resbaló, cayéndose al agua.

Rápidamente, Brad Pitt, que se encuentra en Venecia presentando su última película Quemar después de leer, tiró el cuaderno de autógrafos que tenía en ese momento en sus manos y cogió con fuerza al joven y lo rescató, salvándole de, a lo menos, pasar un muy mal rato.

Una vez que el fan estuvo fuera del agua, Brad Pitt le firmó el anhelado autógrafo.

Busca en "Los mas Hombres" otras notas de Brad

Eligieron a los latinos más sexy

Eduardo Noriega







Eduardo Yañez


Alex González



Christian Meier


La revista People en Español premió al mexicano Eduardo Yañez con el primer puesto del ranking, que incluyó también a galanes como Chayanne y Ricky Martin.

El actor mexicano Eduardo Yañez fue elegido como el latino más sexy de 2008 por la revista People en Español, que también colocó en la codiciada lista al batería de Maná, Alex González, y los cantantes boricuas Chayanne, Ricky Martin y Luis Fonsi.

El actor peruano Christian Meier, que tras el éxito de El zorro, la espada y la rosa encarna a Santos Luzardo en la versión televisiva del clásico de la literatura "Doña Bárbara" junto a Edith González también es uno de los más sexis de 2008.

Los también actores españoles Antonio Banderas y Eduardo Noriega y su compatriota, el cantante David Bisbal figuran entre los primeros lugares de esa famosa lista, que contiene 15 nombres y que cada año publica la revista.

Yañez, un galán de 48 años, que da vida al panadero "Juan Reyes" en "Fuego en la sangre" que transmite la cadena Univision, aparece sonriente en la nueva edición de People en Español con la que conversó sobre su hijo, su relación con la también actriz Angélica Rivera, con quien se rumoreó tuvo un romance.

"Destilando Amor", que finalizó recientemente junto a Rivera, y "La verdad oculta" están entre los exitosos melodramas que ha protagonizado este veterano actor, que un día hizo sus maletas y marchó a Hollywood, de donde ha vuelto a las telenovelas en su país, tema del que también habla en esta edición.

Según este cotizado actor, son sus personajes los que le han llevado a encabezar este año la lista de People.

Yañex dejó México en 1991 con destino a Hollywood en donde inició tomando cursos de inglés, pero, tras 16 años donde luchó por pequeños papeles en televisión y películas, que le llevaron a compartir con Demi Moore, y a filmes como "Wild Things" y "Man on Fire", y series como "CSI: Miami" y "Cold Case", de la cadena CBS, el actor regresó a su país tras no lograr la meta que se había trazado.

Otros nombres en la lista son los cantantes mexicanos Germán Montero y Pee Wee; el actor argentino radicado en Puerto Rico, y juez de "Nuestra Belleza Latina" Julián Gil; y los cantantes, el puertorriqueño Robbi Draco Rosa, y el dominicano-puertorriqueño Romeo, del grupo Aventura.

viernes, 29 de agosto de 2008

Andy Kusnetzoff, un periodista a todo terreno






Pasó de las alfombras rojas en CQC a recorrer la realidad del país en Argentinos por su nombre. Asegura que lo fascinan los contrastes, reconoce haberse avergonzado de alguna nota, y dice sentir asco de la corrupción de la política.


Por qué buscás y mostrás lo argentino?
—Porque me pega de cerca. Siempre me interesó mucho, quizá por haber vivido afuera de chico (hizo de primero a quinto grado en Brasil). En Argentinos, somos como somos mostraba el chanta. Argentinos por su nombre es más real. Es el reality de los argentinos, que no están encerrados en ninguna casa, están sueltos. Somos nosotros los que nos metemos adonde están.
—Cuando conducías en estudio se te veía muy contenido y acelerado, ¿lo tuyo es la calle?
—Con el minuto a minuto terminás analizando los programas de otra manera. Cuando las notas garpan mucho, el piso termina siendo una transición para ir rápido a la nota. ¿Para qué nos vamos a apurar para mostrar una nota? ¡Quedémonos con la nota! Igual me gustaría hacer un programa en estudio, pero necesito tiempo para poder contar lo que quiero. Si tengo nada más que una hora, garpo más en la calle.
—Ahora, como nunca, se te ve explorar y explotar los contrastes sociales, ¿por qué?
—Me fascinan los contrastes. En el primer mundo son más parejos los contrastes, todos sacan un crédito y tienen derecho a una casa. Acá, el contraste es muy fuerte, me gusta mostrar eso. Gente que tiene mucho y gente que no tiene nada...
—Y juntarlos en una misma situación...
—Cambiar los roles, y darte cuenta de que a veces la felicidad no pasa por el que tiene plata. Gente con mucho menos te trata mejor o es más feliz que gente que tiene mucho pero no tiene la solución a su infelicidad.
—En algunas notas ¿viviste momentos de miedo?
—Pocos, pero pasé. Nunca arreglamos con la policía, salvo la nota de Giordano en la Villa 31, porque había que llevar una infraestructura. Pero nunca lo hacemos, porque si vas con la policía, no te habla nadie. Hay situaciones que te metés en la multitud y empieza con cariño pero después se excitan todos juntos y uno queda un poco expuesto. Vino la barra de Tigre y uno dice ¿quién me mandó?
—Fue cuando tuviste que tomar “vino loco”.
—El “vino loco” hay que probarlo. Es cortesía. La gente más humilde reconoce también adónde vamos. Hice una carrera siguiendo gente poderosa, fui a todos los eventos de todos los países del mundo, festivales de cine y la alfombra roja, no hay lugar más glamoroso que ese, y yo fui el que más lo cubrió. Y creo que en un punto te agradecen, dicen: “¿Venís a mostrar esto? Yo me copo”.
—¿Hacés periodismo?
—Absolutamente. En CQC me decían que no era periodismo. Que use el humor no tiene nada que ver con que no sea periodismo. En este programa pasa lo mismo: no tengo un traje y un micrófono, pero el periodista cuenta algo, y el televidente se lleva algo. Trato de entretener e informar. Si lo ves y tenés algo para comentar el día siguiente, para mí eso es periodismo.
—¿Cuánto hay de casual y cuánto de producción en el programa?
—Es un cóctel. No es que salimos a la nada. La producción labura mucho en cosas que no se ven. Es muy raro y muy difícil producir este programa. Hay que tener un poco de todo: valentía, rapidez, espontaneidad, saber ver. Y humor, que es muy importante.
—¿Te sale naturalmente?
—A mí me sale. Tengo que controlarlo. Lo empleé en todos los laburos, y en la vida, pero hay que ser ubicado, hay situaciones que no dan para hacer humor: AMIA, desaparecidos, asesinatos...
—¿Qué te da trabajar en la calle?
—La calle te aviva, y van pasando cosas. La detención de los chicos que no tenían documentos, que le prestamos el teléfono para que llamen a los padres y les alcancen los documentos, y mientras yo le llevaba pizza a la policía para demorarlos, y que no se los lleven... para mí eso es hacer periodismo de humor, pero sobre la realidad total.


—¿Te sentís imitado, o al menos homenajeado?
—Me da medio pelotudo si digo que inventé algo. Si pude imponer un estilo y me homenajean, bienvenido sea, lo agradezco. Es un halago que me reconozcan el lugar de haber tratado de hacer algo distinto en su momento. Es lo que trato de hacer: reinventarme todo el tiempo, lo más difícil.
—En general, los protagonistas de tu programa se toman ciertas licencias. ¿Por qué no lo dejaste manejar a Pity, de Intoxicados?
—(Se pone serio) Me preocupa la situación vial. No estaba el Pity en condiciones de manejar, esa es la verdad. Tratamos de apoyar a los chicos del colegio Eco, y me dio un poco de vergüenza poner al aire lo de Marcos Di Palma, no fue el mejor ejemplo (N. de la R.: cuando el corredor, al volante del 206 del programa, tiró freno de mano en una esquina –Humboldt y Nicaragua, frente al bar Dubliners–, los paró la policía, y Di Palma no tenía registro). Pero queda entendido que fue una situación artística porque estábamos grabando.
—¿Podés caer en contradicciones?
—Trato de ser coherente conmigo, trato de no tener contradicciones. Uso el cinturón de seguridad, cuidamos un montón eso, pero hay licencias artísticas que no tienen que ver con la educación vial. Trato de no tener contradicciones en mi vida, no en la televisión. Es fundamental.
—¿Viste o viviste hechos de corrupción en la tele?
—La veo en muchos lugares. En la tele no la vi, tampoco estoy metido todo el tiempo en la tele, estoy todo el día laburando. Supongo que no debe ser un lugar exento de corrupción. No me cabe la corrupción ni los políticos que afanan, más teniendo conciencia de cómo está la gente. El sistema es muy perverso. Me da asco cuando alguien roba. Menem me da asco, todos sus funcionarios me dan asco, los sobresueldos me dan asco. Todos los actos de corrupción: desde el jardinero de De la Rúa hasta los sobornos del Senado, los van a tener que explicar. Y a este Gobierno le pido que explique las cosas. Nada está probado, pero que expliquen, quiero entender qué pasa con Skanska, qué pasó con Felisa Miceli, por qué la denuncia a Picolotti; y nadie explica nada. Quiero que expliquen. La gente tiene derecho a saber qué hace el funcionario público.
Un ratito con la fama
—Además de dar notas, ¿qué otras cosas te molestan del medio?
—No quiero ser famoso. Tengo un laburo público y me gusta estar para expresarme, pero no es mi objetivo que me reconozcan por la calle.
—Y sin embargo, sos famoso.
—Soy conocido como consecuencia de un laburo. Hoy famoso puede ser cualquiera. No es lo mismo famoso, que conocido y mediático. Uno puede ser conocido por el laburo que hace, pero el fin es hacer el laburo y la consecuencia es ser conocido. Otro fin es querer ser famoso y ser conocido.
—¿Y cómo la llevás?
—El pibe que se la pasa quejando porque lo reconocen en la calle y le piden una foto... sería medio pelotudo si lo hago. Me va bien, me reconocen, me regalan ropa... si te digo que la paso mal soy un boludo, y la verdad es que soy un privilegiado. Y estoy contento y feliz por eso.
—¿Crecerá Mandarina? ¿La imaginás algún día como Cuatro Cabezas?
—No da para comparar. Madarina es una productora boutique, que está empezando, y estamos contentos, hay mística.
—¿Tenés enemigos?
—En televisión ¿enemigos? No... creo que no


Los hombres con más estilo de Hollywood

Rebeldes, rudos o elegantes, la historia del cine siempre tuvo sus preferidos: cuáles son los más grandes íconos de la imagen y qué podemos aprender de ellos.



Gael García Bernal Galán prototipo de Palermo Hollywood (¿no es el candidato ideal para publicitar cualquier marca de ropa de la zona?). Su paso por Londres, donde estudió actuación durante un tiempo, no tuvo derivaciones british visibles. El encanto de Gael no está en la distinción o el refinamiento, sino en la empatía que genera su voluntad de no negarse a nada: fue cara visible del cine mexicano de exportación, le cumplió la fantasía a Almodóvar con un rol triple que incluía una faceta travesti y hasta fue dos veces el Che. El toque de charme definitivo fue su adorable performance en el último viaje de Michel Gondry, donde sorteó el dificilísimo desafío de no quedar opacado ante el brillo enceguecedor de Charlotte Gaunsbourg. Y eso que mide 1,68. Foto de Conde Nast; Corbis/Latinstock




James Dean El mito. Se sabe; aquello de vivir rápido y morir joven tuvo en Dean un modelo ineludible. Pero su venenoso magnetismo estuvo relacionado, sobre todo, con la explotación deliberada de la ambigüedad, algo que de algún modo heredó de su precedente más claro, Marlon Brando. Que uno de los propietarios más atildados de la elegancia en la historia del rock, Morrissey, lo haya tenido siempre como referencia es una prueba contundente de su incomparable punch. Dean fue la imagen de la rebeldía, el dolor y la pasión. De todo aquello que, en suma, es importante para ser un héroe trágico cuando ya están asegurados los jeans ajustados, la camiseta blanca, la campera de cuero, las botas texanas y el cigarro en los labios.




Marcello Mastroianni Fama de mujeriego bien ganada (su relación con Catherine Deneuve lo expía de cualquier discusión sobre el gusto), buenas artes para la conversación, notoria inclinación por el clasicismo... Mastroianni siempre supo ir a lo seguro, por eso fue un caso ejemplar de perdurabilidad: el italiano dejó este mundo manteniendo la elegancia intacta, algo más complicado de lo que muchos imaginan. En su apogeo, hasta cuando le tocó jugar de perdedor, como en la magnífica adaptación de un relato de Dostoievski que llevó a cabo Visconti en Noches blancas, conservó la línea. En esa época, fines de los 50, inicios de los 60, un seductor de esta talla sólo era posible si lograba lo que logró Marcello: ser un ideal al alcance de todos. O sea, un magnífico impostor.




Johnny Depp Un resultado de la planificación obsesiva: Depp está parado con un pie en lo popular y otro en lo sofisticado gracias a su muy buen tino para elegir. Ganó prestigio por su roce con directores muy bien considerados por el público indie –Jim Jarmusch, John Waters, Tim Burton– y audiencia con su versión ATP, la de la saga Piratas del Caribe. Su ascendencia cherokee es un condimento exótico para los amantes del detalle. Buen lector, coleccionista de pinturas, integrante de una banda de rock... Todo tan calculado como la docena de tatuajes que lleva en su cuerpo. La clave, de todos modos, es su enorme versatilidad: puede ser un ingenuo delirante, un galán ardiente, un yonqui descontrolado, un asesino lúgubre y sangriento o un personaje de fábula con la misma solvencia. Es decir, todo le queda bien.




Sean Connery Para muchos, el mejor James Bond, y no es poco decir en términos de estilo (aunque él dice que a esta altura ya odia ese personaje). Escocés independentista, ha declarado alguna vez que no ve nada malo en pegarle a una mujer, lo que le restó brillo a su perfil de galán. Con 77 años, sigue siendo un modelo: no hace mucho la revista CQ lo consideró "uno de los hombres con más estilo de los últimos cincuenta años". Un secreto de Connery es que no sólo seduce a la platea femenina; también despierta interés en muchos hombres, que se identifican con la virilidad sin ambigüedades de este hijo de un camionero. Como es lógico, ostenta el título de Caballero del Imperio Británico, otorgado por la reina Isabel II en el año 2000. Un señor.




Marlon Brando Aunque suene paradójico, muchos hombres suelen perder atractivo, dicen algunas mujeres, por ser "demasiado bonitos". Fue el caso de Delon y, sin duda, el de Brando, que resolvió fortuitamente esa desventaja cuando le rompieron la nariz en un juego de manos con compañeros de elenco de Un tranvía llamado deseo. El cambio que sufrió su rostro le dio un aspecto de hombre rudo que elevó su sex appeal. En su época, la imagen de rebelde atormentado que luego emularía Dean no era tan bien considerada, pero sí la más lógica para un adicto a la provocación. La eficacia de su estilo es asombrosa, si se tiene en cuenta que su época dorada no duró mucho (apareció en los años 50 y a mediados de los 70 su deterioro físico ya era inocultable). La necesidad de desarrollar una personalidad fuerte terminó marcando a fuego su carrera como actor: siempre fue "Brando haciendo de", una persistencia que terminó por hacerlo inigualable.




Michael Caine Nunca abandonó del todo su acento cockney, fruto de su origen (nació en una familia de clase obrera de Londres) y muestra acabada de su enorme personalidad. Es, probablemente, el galán más nerd de esta lista y el menos preocupado por seguir el catálogo de lugares comunes del buen mozo abnegado. Esa leve indolencia también tuvo repercusiones en su carrera: no siempre escogió bien sus trabajos, pero supo recuperarse y hasta le dieron -¡otro más!- el título de Sir en su país. Se podría decir que construyó su estilo por oposición: la del espía Harry Palmer, una de sus caracterizaciones más logradas, es contracara del radiante charme de James Bond. En vez de seducir con joyas y restaurantes lujosos, Palmer les cocinaba a sus chicas sin quitarse las gafas. La vulgaridad como estrategia.




Paul Newman Galán norteamericano por excelencia, Newman no sólo aprovechó el poder de sus increíbles ojos azules a lo largo de su larga trayectoria como actor. También supo adaptarse a los cambios que se produjeron en Hollywood entre los 50 y los 60 (del moralismo y la represión al ambiente liberal e iconoclasta) y fue un culto permanente de la buena letra: sirvió en la Marina estadounidense, fue un muy buen jugador de fútbol americano en su época universitaria, impulsó la lucha contra las adicciones a las drogas y el armamentismo y creó una línea de productos alimenticios de altísima calidad cuyas ganancias destinó, en buena medida, a la caridad. También participó en las 24 horas de Le Mans. Su momento de gloria como galán maduro fue en El color del dinero (1986, tenía 61 años), con la que ganó un Oscar y le dejó claro a su partenaire ocasional Tom Cruise lo que nunca iba a poder ser.




Jude Law Otro hombre inteligente. Para exorcizar los fantasmas de Michael Caine, de quien es un claro sucesor, nada mejor que trabajar con él haciéndose cargo del mismo papel que su modelo había encarnado 35 años atrás en la remake del thriller de Juego macabro. La estrategia tuvo humor y algo de perversión, dos de las armas predilectas de este londinense de pura cepa al que le calzan perfecto los roles ambiguos (El talentoso Sr. Ripley, Closer). Norah Jones, quien tuvo que besarse con él en el filme My Blueberry Nights de Wong Kar Wai, habla maravillas de Jude. Aunque su rol era el de un simple chofer mujeriego, su look en el filme Alfil fue un manual de estilo para el hombre del siglo XXI. Su objetivo inmediato es convertirse en Hamlet para el prestigioso teatro inglés. Paso a paso, Law construye su imagen sin preocuparse demasiado por la originalidad, más bien con la tradición como guía.


Santiago Almeyda en Patinando por un Sueño






Anoche Santiago Almeyda y Jésica Machín obtuvieron el puntaje más alto (24) de la tercera gala de Patinando por un Sueño 2008, con música de películas. El ex integrante de Gran Hermano, luego de patinar con la música de la película Hércules, recibió los elogios del jurado que integran Laura Ubfal (voto secreto), Marcelo Polino (7), Reina Reech (8) y Florencia de la V (9). “Un comienzo auspicioso”, dijo Polino. Reina Reech admiró el físico de Almeyda: “Santiago es un bombón asesino”, dijo, y pidió a las bailarinas que le quitaran la casaca; éste accedió para complacer a la platea femenina.Antes de la performance de la pareja, el grupo “Los grosos” fueron al estudio para alentarlos y de paso Tinelli los invitó a que canten su hit “el ena-no”, que hizo bailar a todos en el estudio, luego el cuerpo del ex GH deleitó a las bailarinas La tercera gala de “Patinando por un sueño” comenzó con la presentación de Adabel Guerrero y Javier Anzil, quienes tuvieron un buen debut en el hielo. El puntaje 22.Barbie Simons y Gustavo Sierra sumaron 20 puntos. Ambos prometieron mucho en la previa, pero a la hora del patinaje decepcionaron un poco al notable grupo de calificadores. Alejandra Maglietti y Jorge Mitre se mostraron muy “nerviosos”, con bajadas desprolijas, comentó el periodista Marcelo Polino. Por su parte, Reina Reech criticó algunos movimientos que tuvo la dupla sobre la pista de hielo. El puntaje 18Esta noche se completará la primera ronda del certamen y se conocerán a las primeras parejas sentenciadas de Patinando por un sueño, luego de que se conozca el voto secreto de la periodista Laura Ubfal. 29 de Agosto de 2008 (Minuto Uno)

jueves, 28 de agosto de 2008

Fernando Colunga, hombre de familia






De un galán o una belleza se dice que logran 'parar el tráfico', pero detener una guerra es algo que, aunque todos lo deseamos, es muy difícil de lograr. Fernando Colunga puede presumir que el final de Esmeralda detuvo un conflicto aunque fuera momentáneamente, y para él, en eso radica el valor de las telenovelas y su mensaje: El amor.
Es famoso en más de 100 países pero nunca pensó que lo sería. A Fernando Colunga lo que le gusta es llevar mensajes positivos a las familias. "Mi primera condición al aceptar un papel es saber si es algo que verá toda la familia. Estoy enfocado a divertir y entretener, y que no se pierden los valores, que la familia no se acabe."

¿Y el éxito, dónde queda?
"Nunca lo veo como Fernando Colunga, el ego si lo recibe "nunca pensé que trabajar en telenovelas me daría a conocer en 130 países, eso es más que una película. Como mexicanos debemos estar orgullosos de ser los número uno en esto. Frecuentemente viene gente de otros países a estudiar el fenómeno de las telenovelas, porque nos ven en Asia, que no se parece a México, y el público se pega a la televisión."
¿A qué crees que se deba este fenómeno?
"Creo que a un tema básico: El amor. Cuando regresaron de Iraq los reporteros de Televisa me comentaron que la gente les preguntaba por las telenovelas. En una ocasión, hasta CNN cubrió el final de Esmeralda, porque la guerra se paró para ver ese final. Imagínate, es una magia que se transmite más allá del idioma. Lo que el mundo necesita es amor, las novelas hablan de amor, es universal, y por eso se ven en todos países. Son una ilusión sana."

En Alborada continuaste con esa ilusión
"Creo que el personaje de Luis gustó, no lo he juzgado ni lo quise juzgar. Para Alborada me senté con historiadores, quienes nos contaron como eran los años 1700, con sus galeones, y todo eso. Me adentré a vivir el cuento al ciento por ciento, a conocer lo que pasaba esa época."

Fue diferente a otros personajes
"Este hombre era científico, tenía una vida es interesante, en una época que la ciencia era penada, se tenía otra mentalidad. Un personaje así me aporta como actor. A diferencia del que siempre es lindo y perfecto, este comete errores, es humano."

¿No extrañas al galán moderno, actual?
"No, porque si te dan la oportunidad de tener este trabajo mágico, si Dios y la vida te ponen aquí, tan sólo hay que dar gracias y aplaudirlo, y pedir que te dejen ahí."

BRAD PITT, VA POR DOS HIJOS MÁS






Brad Pitt quiere tener dos hijos más con Angelina Jolie el año que viene. El actor, que hace poco se convirtió de nuevo en padre con el nacimiento de Knox Leon y Vivienne Marcheline, admite que no tiene intención de parar a los seis hijos. Cuando le preguntaron sobre cómo estaban sus mellizos, Brad contestó que "están bien", y añadió: "tendremos dos más el año que viene". El protagonista de 'Burn after reading' está promocionando en Venecia la última película de los hermanos Coen. Allí reconoció que comparte sus hijos con su amigo George Clooney, quien bromeó acerca de la paternidad: "Hoy mismo me voy a casar y tendré hijos".

Brad Pitt quiere tener dos hijos más con Angelina Jolie el año que viene. El actor, que hace poco se convirtió de nuevo en padre con el nacimiento de Knox Leon y Vivienne Marcheline, admite que no tiene intención de parar a los seis hijos.

Cuando le preguntaron sobre cómo estaban sus mellizos, Brad contestó que "están bien", y añadió: "tendremos dos más el año que viene". El protagonista de 'Burn after reading' está promocionando en Venecia la última película de los hermanos Coen. Allí reconoció que comparte sus hijos con su amigo George Clooney, quien bromeó acerca de la paternidad: "Hoy mismo me voy a casar y tendré hijos".

'Brangelina' no tendrán problemas para criar a sus hijos. Según han publicado recientemente los medios franceses, la pareja puede percibir los subsidios familiares franceses: 274,47 euros mensuales por los tres primeros hijos (Maddox, Zahara y Pax) y otros 154,15 euros por cada uno de los demás (Shiloh , Knox y Vivienne), lo que suma 736,92 euros cada mes en ayudas para una familia cuyos ingresos anuales rondan los 35 millones de euros.



Jonas Brothers - Burnin' Up - Official Music Video (HQ)


¿Por qué no aparece por ningún lado la hija de Facundo Arana?






¿Alguien vio por alguna parte a la hija de Facundo Arana? Nunca un nacimiento en el mundo del espectáculo fue olvidado tan rápidamente. La pequeña Indiaestá guardada junto a su madre, la modelo María Susini, mientras que su papá, el galán de "Vidas Robadas", no sabe y no contesta.

Nada habría de malo en guardar la intimidad familiar como decisión de un bajo perfil buscado para no exponer a la niñita, pero -cuentan los íntimos del entorno del galán- que no es sólo por eso:Facundo Arana, revelan algunas fuentes, no estaría viviendo bajo el mismo techo con la madre de su hija; con quien nunca habría llegado a tener una relación formal como pareja.
La noticia del embarazo de Susini, el año pasado, sorprendió al medio pero sobre todo a ellos: no eran novios tampoco en ese momento, desmentían por entonces públicamente el romance seguros de que no los pescarían jamás, simplemente porque tal romance había sido cosa de "un par de veces". Pero en ese par de veces... la naturaleza hizo lo suyo.
La crisis de la que todos hablan pero nadie reconoce ni reconocerá tuvo varias etapas. Primero, el simbronazo de la noticia y cómo encararlo públicamente y puertas adentro. Luego la lógica alegría por una paternidad y la llegada al mundo de quien es hoy, sin dudas, lo más imporante en la vida del actor: su hija India; que tal como él ha confesado "es lo más feliz que me pasó en esta vida", y ¿por qué no creerle?
Pero eso no quita que su relación con la madre de la beba diste de ser la ideal. El entorno de Arana cuenta en secreto que, tras el nacimieto de India, en mayo, el protagonista de la novela central de Telefé y la modelo no conviven, y que ella "tiene terminantemente prohibido hablar públicamente del asunto", luego que diera algunas notas este verano en la playa durante el embarazo, lo que lo enfureció. Facundo Arana tambien le aseguraría todos los privilegios y caprichos, con tal de que, por ahora, no vuelva a trabajar . Susini habría suspendido varias campañas por pedido expreso del padre de su hija, luego de hacer varias durante la temporada pasada, que también le molestó. Lo ideal, para Facundo, es evitar cualquier contacto con la prensa ni salidas donde puedan ser fotografiadas por paparazzis agazapados o micrófonos indiscretos. Nada. Silencio total. Hermetismo absoluto.

Pero ¿por qué? ¿Cuál sería el verdadero motivo para tanta discreción? ¿Qué tendría de terrible que una pareja que no llegó a ser tal blanquee la situación y críe a su hija en paz y por separado?Preguntas que Arana, siempre correcto, siempre lindo, siempre en paz, no contestará.
Mientas tanto, a regañadientes, aceptó estirar su novela un mes más -grabará hasta fin de noviembre- con un público medio que le es fiel al producto pero que tampoco lo ha completado de felicidad este año: los que saben dicen que su relación con el director de la tira, Miguel Colom, no es de las mejores; y que en el fondo no tolera que la pareja romántica de la tira con Mónica Antonópulos no haya pegado en el público y que el protagonismo de Jorge Marrale y Solita Silveyra se haya transformado en el verdadero gancho del producto. Suspendió su viaje alrededor del mundo en plan benéfico, y solo espera que llegue fin de año para evaporarse por un tiempo, lejos de las fotos que vaya uno a saber por qué, nadie le saca junto a su hija y la madre de ésta. R.L.


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