El andaluz viene de dar un concierto para más de 500.000 personas en la Plaza Cibeles de Madrid. Habla de su cuarto disco, "Sin mirar atrás", y del acoso de sus fans.
David Bisbal es una estrella internacional de pop. Pero, desde el inicio de su carrera, también es un hombre de la imagen. Surgió de la edición española del reality Operación Triunfo. Ahí se hizo famoso, llegó a la final y terminó segundo, pero confirmó esa premisa que dice que no siempre el primero es el mejor. O, al menos, el más exitoso. A siete años de su disco debut, Corazón latino -un título que definía claramente su horizonte artístico-, las copias de sus trabajos y las descargas de canciones se venden por millones. Ahora viene de dar un concierto para más de 500 mil personas en la Plaza de Cibeles de Madrid, en apoyo a la candidatura de la ciudad para los Juegos Olímpicos de 2016, que finalmente organizará Río de Janeiro. "Aquello fue algo increíble. Siempre le estaré agradecido a los funcionarios por la invitación. Aunque no nos eligieron, estoy feliz porque la plaza quedó en América latina, que nunca había tenido la oportunidad de hacerlo. Pero claro, me puse un poco triste porque España es mi tierra".
Apenas baja de su habitación, como si fuese el conductor de un programa del prime time, le habla suelto a una cámara, que registra todos sus movimientos. Luego, ese material será volcado a un DVD y comprado por las miles de fans que se reparten por América latina, Europa y los Estados Unidos. "Ahora, amigos, entramos a una conferencia de prensa", dice, sonrisa y rizos en movimiento. Esos rulos ya son una marca registrada, que generan largos debates en los foros cuando el hombre decide, cada tanto, cambiarse el look.
De visita relámpago a la Argentina para promocionar Sin mirar atrás, su cuarto disco, Bisbal habla de su próxima paternidad, de las encuestas que lo ubican como uno de los tres españoles más famosos, de las raíces flamencas y de las fans que, a veces, superan los límites.
Aunque es un disco pop y el corte de difusión se llama "Esclavo de tus besos", hay canciones de otros géneros. ¿Tenés miedo a repetirte?
No, no es eso, hombre. Mi identidad siempre estará dada por las raíces de mi tierra, por Andalucía y por mi manera de cantar un poco aflamencada. Pero quise en este disco poner un blues, un funk, una rumba y, claro, baladas. No me gusta que la gente me vea como cantante de un solo género. A la hora de salir de gira, disfruto más haciendo canciones variadas. Es mucho más divertido.
Bueno, habiendo nacido en Almería como Niño Josele y Tomatito, quizás un disco que represente tu identidad sería de flamenco, de coplas. Estás en situación de poder elegir. ¿Harías un trabajo de flamenco puro?
No, estoy seguro de que no lo haría. Aunque nací en Andalucía, siento que para hacer ese disco tendría que haber escuchado sólo flamenco de niño. Si no, no sería creíble porque no soy cantaor desde chiquito.
Además, los críticos del género no serían muy indulgente con vos.
Serían muy duros conmigo. No lo entenderían y tendrían razón en hacerlo. No lo haría por respeto a los grandes del flamenco, a Camarón y a todos ellos. Yo soy un cantante pop y estoy bien así.
Cada tanto, salen encuestas que te dan como el español más famoso, junto a José María Aznar o a José Luis Rodríguez Zapatero. ¿Qué te provocan esas noticias?
¿Junto a Aznar? (se ríe). Hombre, eso siempre genera responsabilidad, porque sales de tu tierra a hacer música y, en cierta forma, la representas. Siempre que sean valoraciones positivas me pongo bien.
"Como sabéis, siempre ha sido importante para mí que seáis los primeros en saber todo lo que me ocurre, tanto a nivel profesional como personal, y más sabiendo que lo que a mí me hace feliz a vosotros os hace aún más. Estoy viviendo un momento maravilloso y quiero que seáis los primeros en saber que el próximo año Elena y yo seremos papá y mamá. Es un regalo único que ha llegado del cielo y del amor, que sin ninguna duda me hará tener una sonrisa más grande en cada escenario. Os queremos mucho". Con ese comunicado de prensa, Bisbal le contó a sus fans el embarazado de su novia, Elena Tablada, con quien actualmente vive en Miami.
En una entrevista que diste en agosto, dijiste que aún no estabas preparado para ser padre. ¿En qué momento de tu carrera llega la noticia?
Bueno, es que uno no va a una escuela que te enseñe cómo ser padre. Ahora, estoy preguntándome cómo será su cara y sintiendo que sumé a mi carrera algo muy bonito. Hace unos días, lo hablaba con Coti y con Alejandro Sanz, que fueron padres muy jóvenes y continuaron con sus vidas artísticas. Alejandro me dijo: "Vas a descubrir un amor que nunca habías sentido. Vas a estar contento, motivado e ilusionado. Y tu carrera se iluminará". Yo tengo mi casa, mi trabajo, soy una persona responsable. El niño o niña vino por sorpresa y fue una gran noticia. Ahora estoy listo para enseñarle las cosas más bonitas de la vida.
El 20 sale el disco y arranca la gira por España, América latina, Estados Unidos, casi 80 conciertos. ¿No te cansa, pensando en la paternidad?
Bueno, es muy importante parar cada tanto. Es clave tener tiempo para descansar, pensar, sentir cosas y escribirlas con tranquilidad. En este disco muchas canciones son mías y esas letras surgen en momentos de reflexión. Pero tampoco quiero parar mucho porque la música ocupa un lugar clave en mi vida.
Bisbal es algo más que un cantante de pop. Desde el inicio de su carrera, le puso la cara a una marca de relojes y colgantes, a otra de telefonía móvil y, para cerrar el cuadro, a causas humanitarias (colaboró en varias oportunidades con la Fundación Alas e hizo una campaña de concientización sobre la utilización de menores en las guerras). Además, tiene una marca de perfume propia, con el sello DB, que acompaña a otros productos que piensa lanzar. "Y es muy bonito para mí transmitir alegría, dar ilusión y algo de confianza a la gente", finaliza el hombre, mientras lo siguen dos asistentes que le indican el próximo destino: entrevista con Susana Giménez. Allá va el hombre. Andaluz de nacimiento, con fraseo aflamencado como sello de cuna. Pero estrella de pop por vocación.
David Bisbal es una estrella internacional de pop. Pero, desde el inicio de su carrera, también es un hombre de la imagen. Surgió de la edición española del reality Operación Triunfo. Ahí se hizo famoso, llegó a la final y terminó segundo, pero confirmó esa premisa que dice que no siempre el primero es el mejor. O, al menos, el más exitoso. A siete años de su disco debut, Corazón latino -un título que definía claramente su horizonte artístico-, las copias de sus trabajos y las descargas de canciones se venden por millones. Ahora viene de dar un concierto para más de 500 mil personas en la Plaza de Cibeles de Madrid, en apoyo a la candidatura de la ciudad para los Juegos Olímpicos de 2016, que finalmente organizará Río de Janeiro. "Aquello fue algo increíble. Siempre le estaré agradecido a los funcionarios por la invitación. Aunque no nos eligieron, estoy feliz porque la plaza quedó en América latina, que nunca había tenido la oportunidad de hacerlo. Pero claro, me puse un poco triste porque España es mi tierra".
Apenas baja de su habitación, como si fuese el conductor de un programa del prime time, le habla suelto a una cámara, que registra todos sus movimientos. Luego, ese material será volcado a un DVD y comprado por las miles de fans que se reparten por América latina, Europa y los Estados Unidos. "Ahora, amigos, entramos a una conferencia de prensa", dice, sonrisa y rizos en movimiento. Esos rulos ya son una marca registrada, que generan largos debates en los foros cuando el hombre decide, cada tanto, cambiarse el look.
De visita relámpago a la Argentina para promocionar Sin mirar atrás, su cuarto disco, Bisbal habla de su próxima paternidad, de las encuestas que lo ubican como uno de los tres españoles más famosos, de las raíces flamencas y de las fans que, a veces, superan los límites.
Aunque es un disco pop y el corte de difusión se llama "Esclavo de tus besos", hay canciones de otros géneros. ¿Tenés miedo a repetirte?
No, no es eso, hombre. Mi identidad siempre estará dada por las raíces de mi tierra, por Andalucía y por mi manera de cantar un poco aflamencada. Pero quise en este disco poner un blues, un funk, una rumba y, claro, baladas. No me gusta que la gente me vea como cantante de un solo género. A la hora de salir de gira, disfruto más haciendo canciones variadas. Es mucho más divertido.
Bueno, habiendo nacido en Almería como Niño Josele y Tomatito, quizás un disco que represente tu identidad sería de flamenco, de coplas. Estás en situación de poder elegir. ¿Harías un trabajo de flamenco puro?
No, estoy seguro de que no lo haría. Aunque nací en Andalucía, siento que para hacer ese disco tendría que haber escuchado sólo flamenco de niño. Si no, no sería creíble porque no soy cantaor desde chiquito.
Además, los críticos del género no serían muy indulgente con vos.
Serían muy duros conmigo. No lo entenderían y tendrían razón en hacerlo. No lo haría por respeto a los grandes del flamenco, a Camarón y a todos ellos. Yo soy un cantante pop y estoy bien así.
Cada tanto, salen encuestas que te dan como el español más famoso, junto a José María Aznar o a José Luis Rodríguez Zapatero. ¿Qué te provocan esas noticias?
¿Junto a Aznar? (se ríe). Hombre, eso siempre genera responsabilidad, porque sales de tu tierra a hacer música y, en cierta forma, la representas. Siempre que sean valoraciones positivas me pongo bien.
"Como sabéis, siempre ha sido importante para mí que seáis los primeros en saber todo lo que me ocurre, tanto a nivel profesional como personal, y más sabiendo que lo que a mí me hace feliz a vosotros os hace aún más. Estoy viviendo un momento maravilloso y quiero que seáis los primeros en saber que el próximo año Elena y yo seremos papá y mamá. Es un regalo único que ha llegado del cielo y del amor, que sin ninguna duda me hará tener una sonrisa más grande en cada escenario. Os queremos mucho". Con ese comunicado de prensa, Bisbal le contó a sus fans el embarazado de su novia, Elena Tablada, con quien actualmente vive en Miami.
En una entrevista que diste en agosto, dijiste que aún no estabas preparado para ser padre. ¿En qué momento de tu carrera llega la noticia?
Bueno, es que uno no va a una escuela que te enseñe cómo ser padre. Ahora, estoy preguntándome cómo será su cara y sintiendo que sumé a mi carrera algo muy bonito. Hace unos días, lo hablaba con Coti y con Alejandro Sanz, que fueron padres muy jóvenes y continuaron con sus vidas artísticas. Alejandro me dijo: "Vas a descubrir un amor que nunca habías sentido. Vas a estar contento, motivado e ilusionado. Y tu carrera se iluminará". Yo tengo mi casa, mi trabajo, soy una persona responsable. El niño o niña vino por sorpresa y fue una gran noticia. Ahora estoy listo para enseñarle las cosas más bonitas de la vida.
El 20 sale el disco y arranca la gira por España, América latina, Estados Unidos, casi 80 conciertos. ¿No te cansa, pensando en la paternidad?
Bueno, es muy importante parar cada tanto. Es clave tener tiempo para descansar, pensar, sentir cosas y escribirlas con tranquilidad. En este disco muchas canciones son mías y esas letras surgen en momentos de reflexión. Pero tampoco quiero parar mucho porque la música ocupa un lugar clave en mi vida.
Bisbal es algo más que un cantante de pop. Desde el inicio de su carrera, le puso la cara a una marca de relojes y colgantes, a otra de telefonía móvil y, para cerrar el cuadro, a causas humanitarias (colaboró en varias oportunidades con la Fundación Alas e hizo una campaña de concientización sobre la utilización de menores en las guerras). Además, tiene una marca de perfume propia, con el sello DB, que acompaña a otros productos que piensa lanzar. "Y es muy bonito para mí transmitir alegría, dar ilusión y algo de confianza a la gente", finaliza el hombre, mientras lo siguen dos asistentes que le indican el próximo destino: entrevista con Susana Giménez. Allá va el hombre. Andaluz de nacimiento, con fraseo aflamencado como sello de cuna. Pero estrella de pop por vocación.
Fuente Clarin
David Bisbal nota Bisbal fotos Bisbal hombres
No hay comentarios:
Publicar un comentario